Bonao.- El alcalde del municipio de Bonao, doctor Eberto Núñez, junto al Concejo de Regidores, rindió un emotivo homenaje al padre Fandry Sosa Ayala por su destacada labor pastoral al frente de la parroquia San Antonio de Padua, donde ha servido con entrega y compromiso durante más de cinco años.
La actividad se llevó a cabo en la iglesia San Antonio de Padua, donde las autoridades municipales declararon al sacerdote como Hijo Adoptivo de Bonao, en reconocimiento a su dedicación, cercanía con la comunidad y liderazgo espiritual. Asimismo, le fue entregada la Llave de la Ciudad, como símbolo de gratitud y respeto por su invaluable contribución al bienestar y fortalecimiento de los valores en el municipio.
El alcalde Eberto Núñez destacó que el padre Fandry ha sido una figura de unidad, esperanza y guía espiritual para los ciudadanos, desempeñando su misión con humildad, amor y vocación de servicio. Por su parte, los regidores coincidieron en resaltar la impronta positiva que deja en cada rincón de la comunidad.
Visiblemente emocionado, el padre Fandry Sosa Ayala agradeció el gesto y reafirmó su cariño por el pueblo de Bonao, al que definió como una tierra de fe, solidaridad y calidez humana. “Me voy físicamente, pero mi corazón se queda aquí”, expresó el sacerdote.
La ceremonia contó con la presencia de miembros de la comunidad, representantes de distintas instituciones, feligreses y autoridades locales, quienes ofrecieron cálidos aplausos y muestras de afecto al homenajeado.
